La casa estaba inundada y los bomberos tuvieron que rescatar al niño desde el exterior
Agentes de la Policía Local pertenecientes a una de las patrullas del departamento de Tráfico rescataron durante la mañana del martes a un menor, de cuatro años de edad, que se encontraba sólo en su domicilio y atrapado en una terraza, en la realización de este servicio se contó con la colaboración de una dotación del Consorcio de Bomberos.
Los hechos se produjeron a las doce menos diez de la mañana, cuando en la central de comunicaciones de la Jefatura de la Policía Local se recibió una llamada denunciando que en la terraza de una vivienda ubicada en la calle San Nicolás se encontraba un menor llorando y bastante nervioso, sin que percibiera a nadie más en el domicilio.
Inmediatamente se dio traslado del aviso a una patrulla del departamento de Tráfico, cuyos integrantes se personaron en el lugar y corroboraron la situación denunciada. Los policías llamaron varias veces a la puerta principal de la vivienda sin obtener respuesta, por lo que uno de los agentes accedió a la terraza en la que se encontraba el niño a través del balcón de la vivienda colindante.
El funcionario comprobó que la puerta de la terraza estaba cerrada con llave, por lo que era imposible regresar a su interior, observando también que un grifo del cuarto de bañó se encontraba abierto y que esa estancia estaba ya prácticamente anegada.
Ante la imposibilidad de acceder a la casa, la Policía Local solicitó la presencia de Bomberos, cuyos efectivos desplegaron una escalera desde el exterior por la que fue rescatado el menor, procediendo a su traslado a Jefatura.
La Policía Local comenzó a recabar datos sobre los responsables del niño, teniendo constancia de que el menor, cuyos padres son de Guinea Ecuatorial, se encontraba a cargo de su abuela, que responde a las iniciales M.L.L.T., nacida en el año 1951 y que se personó en las dependencias policiales a las dos y media de la tarde. Contra ella se han iniciado diligencias judiciales por las posibles responsabilidades en las que hubiera podido incurrir, entregando al pequeño a un hermano de veinte años edad.
Inmediatamente se dio traslado del aviso a una patrulla del departamento de Tráfico, cuyos integrantes se personaron en el lugar y corroboraron la situación denunciada. Los policías llamaron varias veces a la puerta principal de la vivienda sin obtener respuesta, por lo que uno de los agentes accedió a la terraza en la que se encontraba el niño a través del balcón de la vivienda colindante.
El funcionario comprobó que la puerta de la terraza estaba cerrada con llave, por lo que era imposible regresar a su interior, observando también que un grifo del cuarto de bañó se encontraba abierto y que esa estancia estaba ya prácticamente anegada.
Ante la imposibilidad de acceder a la casa, la Policía Local solicitó la presencia de Bomberos, cuyos efectivos desplegaron una escalera desde el exterior por la que fue rescatado el menor, procediendo a su traslado a Jefatura.
La Policía Local comenzó a recabar datos sobre los responsables del niño, teniendo constancia de que el menor, cuyos padres son de Guinea Ecuatorial, se encontraba a cargo de su abuela, que responde a las iniciales M.L.L.T., nacida en el año 1951 y que se personó en las dependencias policiales a las dos y media de la tarde. Contra ella se han iniciado diligencias judiciales por las posibles responsabilidades en las que hubiera podido incurrir, entregando al pequeño a un hermano de veinte años edad.
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